Hace unos años la tarjeta de crédito se convirtió en un apéndice de mi persona y con tanta tarjeta por aquí y por allá, hasta llegué a olvidar el color de algunos billetes. A mí, que todavía tengamos que andar pagando con billetes y monedas me parece un atraso. Alta tecnología por todas partes, televisiones 3D, cámaras microscópicas... y en muchos sitos todavía hay que pagar en efectivo.

Un ejemplo de que otro mundo es posible es que los que traen las pizzas a mi casa ya vienen con el datáfono incorporado. Sí señor, eso sí es servicio al cliente! ¿Quién no ha querido pedir alguna vez comida a domicilio y se ha dado cuenta de que no tenía dinero? Después de la pizzería, probé con el chino, y también traen datáfono, eso sí, menos moderno, porque la pobre china tuvo que entrar en mi cocina para enchufarlo...
Y es que no entiendo que existan los códigos bidi y la tecnología 4G pero a nadie se le haya ocurrido investigar cómo puedo pagar mi compra del Mercadona con el móvil o, por qué no, con la huella dactilar. Así se evitarían muchos problema; nada de billetes falsos ni robos en los cajeros, dedo índice preparado y a comprar. Además, así las cajeras del Día no te dejarían ningún céntimo a deber, con lo que supongo que la cadena de supermercados se iría a pique.
Bueno, como esto aún no ha llegado, me toca darme un paseo hasta el cajero que mañana tengo que pagar el "numerito" del coche en efectivo. Que pasen estas cosas en el siglo XXI...