miércoles, 13 de abril de 2011

Subidas de tono

De vez en cuando, en todo grupo de mujeres adultas, tiene lugar una conversación algo subida de tono. La de hoy ha sido bastante light la verdad, pero teniendo en cuenta la media de edad de las presentes, el escándalo estaba garantizado. Con estos temas siempre hay alguien que se siente violento y se incomoda cuando los demás hablamos sin pudor de intimidades varias (siempre diciendo que te lo ha contado una amiga, por supuesto).

En mi oficina, el único varón en 10 kilómetros a la redonda es curiosamente el que más se violenta. De hecho, ha puesto fin a nuestra alocada conversación con un “chicas, por favor, que hay una reunión aquí al lado”. Estoy segura de que los asistentes a esa reunión estarían encantados de oír nuestras risillas picaronas y comentarios verduscones, pero el caso era chafarnos la fiesta porque sus inocentes oíos no pueden escuchar semejantes barbaridades. Esos luego son los peores.

Hace algunos años (ay dios mío como pasa el tiempo), “estudiando” en la biblioteca de la facultad con unas amigas, nos dio por poner en común experiencias y dudas sexuales varias (mamá, yo sólo escuchaba). Poco a poco nos fuimos animando, hasta el punto que Natalia, la más prudente, terminó escandalizada cogiendo de nuevo el libro e intentando concentrarse en la historia universal del siglo XX. Sorprendentemente todas aprobamos el examen.

Sólo por fastidiar, mañana pienso volver a sacar el tema, esta vez centrado en juguetes y disfraces. Con el puritanismo de algunos puede que haya algún desmayo, pero merece la pena ver cómo se animan mis compañeras y terminan confesando sus más íntimos secretos. Aunque, pensándolo bien… no sé si estoy preparada para escucharlos, que una también tiene un límite.

1 comentario:

  1. Cuando saques el tema asegúrate de que el foro sea variado y que incluya a aquella compañera que "una vez" se coló en la zona de intercambios liberales de una discoteca...

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